La residencia de discapacidad intelectual, ubicada en la sede de Arroyomolinos, presta atención residencial y de centro de día
Está destinada a proporcionar alojamiento, rehabilitación personal y social, cuidados personales y asistencia especializada, ya sea temporal o permanente, a personas adultas con discapacidad intelectual y con graves problemas del comportamiento o enfermedad mental, y/o afectadas de trastornos del espectro autista.
La residencia tiene el objetivo de conseguir el máximo desarrollo de las capacidades y posibilidades de integración social y familiar de sus usuarios.
Disponemos de 226 plazas concertadas con la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid, repartidas en varias unidades diferenciadas por el perfil de los residentes, (en función de edad, necesidades de apoyo y problemática conductual).
Nuestra residencia constituye un recurso socio-sanitario fundamental para la atención a personas; que por circunstancias personales o familiares no pueden permanecer en su domicilio o en entornos residenciales normalizados y que requieren de una atención especializada.
Desarrollamos programas de rehabilitación (fisioterapia, estimulación multisensorial, terapia ocupacional), atención médico-psiquiátrica y farmacológica, cuidados de enfermería, habilitación personal y social (autonomía personal y funcionamiento independiente), actividades de ocio y tiempo libre, atención psicológica y atención familiar y social.
El total de las plazas concertadas se corresponden con tres servicios de atención separados en cinco unidades residenciales diferenciadas:
183 plazas de atención residencial y de centro de día, generalmente de carácter permanente, para personas con discapacidad moderada y grave y graves problemas del comportamiento y/o enfermedad mental asociada, destinadas a proporcionar alojamiento, manutención y atención especializada con el objetivo de lograr una mejora en el funcionamiento personal de los distintos ámbitos de la vida, tanto en el plano cognitivo como en el plano físico, emocional o social, logrando de esta manera una mayor participación de los residentes en las actividades de la vida diaria y en aquellas actividades significativas para cada persona.
29 plazas de atención residencial y de centro de día con carácter de estancia temporal, con el objetivo terapéutico de la rehabilitación intensiva en residentes con discapacidad intelectual ligera-límite y problemática conductual grave, con edades comprendidas entre los 18 y 40 años. A través de atención especializada y con el objetivo de conseguir la remisión o disminución de la sintomatología conductual y la estabilización clínica mediante tratamiento psiquiátrico, psicológico y social especializado, junto con terapias de rehabilitación y reinserción.
15 plazas residenciales y de centro de día para personas con discapacidad intelectual afectadas de trastornos del espectro autista, destinados a proporcionar alojamiento, manutención y atención especializada con el objetivo de aumentar el bienestar general y la calidad de vida de las personas, de manera significativa, utilizando modelos de intervención centrados en la comunicación y el apoyo conductual positivo, que permitan ensenar al residente conductas alternativas que sustituyan a las problemáticas y que tengan su misma equivalencia funcional, para que estas dejen de ser necesarias.
El modelo de intervención
La intervención y los cuidados se fundamentan en un proceso que se inicia con la evaluación las necesidades de apoyo y las capacidades de los residentes y prosigue con la realización de planes individuales e interdisciplinares de tratamiento integral, protocolizado, que utiliza técnicas seguras, efectivas y proporcionadas, basadas en buenas prácticas aportadas por la evidencia científica y el uso racional de los recursos disponibles.
En el modelo asistencial de Hermanas Hospitalarias, la atención a los residentes se centra en la persona, en su relación con la enfermedad y la discapacidad, en su derecho a la autonomía, a la intimidad e información, en su participación y en la promoción de sus capacidades, abarcando para ello diferentes momentos asociados a la promoción de la salud: prevención, tratamiento y rehabilitación o reeducación.
El abordaje de la problemática conductual y de la enfermedad mental de los residentes se lleva a cabo desde un enfoque biológico y humanista, intentando habilitar a la persona para que esta se adapte lo más posible al ambiente y a las actividades habituales esperadas y dirigido a mejorar su funcionamiento psicosocial.
Los profesionales
La Residencia dispone de un equipo multidisciplinar y especializado de profesionales del ámbito sociosanitario (médico internista, psicólogo, psiquiatra, trabajo social, fisioterapeuta, terapeuta ocupacional, enfermera, auxiliar de enfermería, educador y monitor) que tras evaluación interdisciplinar de cada usuario, elaboran el Programa de Atención Especializada, que comprenderá todas aquellas actuaciones dirigidas a alcanzar y mantener su salud, autonomía personal e integración familiar y social en el mayor grado posible.
- Director Técnico de la Residencia de Discapacidad Intelectual D. Manuel Calvo Muñoz
- Supervisor de Enfermería de la Residencia de Discapacidad Intelectual D. Pedro Lucena Campillo
Preguntas frecuentes
Cómo acceder
Corresponde a la Consejería de Familia, Juventud y Política Social de la Comunidad de Madrid la determinación de las personas que hayan de ocupar las plazas concertadas, elaborando la Residencia informe razonado de la idoneidad de ingreso en el Centro en los casos de discapacidad intelectual y problemática conductual grave o enfermedad mental asociada.